El ex jinete Carlitos Grullón
rinde homenaje a sus padres
El ex jockey dominicano Carlos Grullón obtuvo licencia para operar como dueño de establos en el hipódromo de Suffolk Down, en Boston, y dio apertura a su incidencia rindiéndole un homenaje póstumo a sus padres designando su cuadra con sus nombres.
El otrora estelar jinete, que reside en los Estados Unidos desde la década de los 80, abrió su cuadra con el nombre de "Establo Doña Santa-Don Quilá", lo que motiva un ascendrado sentimiento de acercamiento a sus raises, como lo resalta nuestro corresponsal Saturnino Rubén Guzmán.
En la apertura de sus operaciones, Carlitos, que también es entrenador, marcó el sábado el debut exitoso del establo Doña Santa-Don Quilá con una victoria en la primera carrera con el ejemplar Marquis Star, conducido por el as de las bridas Orlando Bocachica.
El cartel, que se desarrolló bajo intensa lluvia, sirvió a Carlitos como el escenario propicio para rendir un homenaje póstumo a sus padres, pués también ganó como entrenador la segunda carrera con Southern Renegade, del establo Babalo Inc.
Como golpe de conga, también, en la tercera jornada, el ejemplar Sammy Good Luck, entrenado de Rafael -El Babalo- Ramos, se llevó los primeros lauros bajo la conducción del jinete Winston Thompson.
Y para no quedarse atrás en la destacada gala de los dominicanos en el hipódromo bostoniano, El Patón, el padre del jinete líder de las estadísticas aqui en el hipódromo V Centenario, Alejandro Gómez, que lleva su nombre, obtuvo un cuarto puesto con Houndslake, en la novena carrera, con la conducción del jockey dominicano Gilbert Estrella, hijo del aún activo y ganancioso jinete Gilberto Reyes.
Nuestro corresponsal, Saturnino Rubén Guzmán, reseña que al hijo del veterano jinete lo empiezan a catalogar como un astro de las bridas, por lo cual está teniendo mucho trabajo y demostrando su estelaridad.
Debido a la confianza que inspira, ha habido casos en que entrenadores no dominicanos le asignan a sus ejemplares, que cierran casi siempre sin amplia preferencia del público pero que, por la habilidad de Gilberto Estrella, se convierten en grandes "palos" o sorpresas que pagan excelentes dividendos en las bancas.