jueves, 8 de septiembre de 2011

"Núnca combatas con un enemigo por mucho tiempo, pues puede darse cuenta de nuestra estrategia."..

Política: Autor del Blogger/Tomás E. Montás


  A ungir a Hipólito
con unidad del PRD


Si Miguel Vargas Maldonado tiene en su propósito de vida alcanzar la presidencia de la República, es decir, llegar a ser Presidente -que bien podría serlo en el 2016- tiene que aprender ahora lo que representa que el Partido Revolucionario Dominicano (PRD) pueda alcanzar el Poder.
Y, para que él llegue a alcanzar esa meta, entonces, la clave es la palabra Unidad, Unidad, Unidad, Unidad, Unidad, Unidad,  Unidad, Unidad, Unidad, Unidad, Unidad, Unidad, Unidad, Unidad, Unidad, Unidad, Unidad, Unidad, Unidad, Unidad, Unidad, Unidad, Unidad, Unidad, Unidad, Unidad, Unidad, Unidad, Unidad, Unidad, Unidad, Unidad, Unidad, Unidad, Unidad, Unidad, Unidad, Unidad, Unidad, Unidad, Unidad, Unidad, Unidad, Unidad, Unidad.
Así, también, Hipólito Mejía sabe muy bien que para llegar a ser nuevamente Presidente, no basta el slogan popular que crea empatía con su candidatura de “Llegó Papá”.
El tiene, necesariamente, que ser ungido con el deseo de todos los perredeístas de que el pueblo lo elija y, mejor, en primera vuelta, porque, como lo dijo el líder José Francisco Peña Gómez:
¡El PRD unido, jamás será vencido!
Es decir, que la relación de la dirigencia y la militancia perredeísta tiene que basarse en la unidad monolítica de propósito y acción para alcanzar el solio presidencial, porque la unidad tiene que ser de buena fe, puesto que la UNIDAD es como unción de los “santos óleos”, una unción que compacta la unidad.
Todos juntos no es la unidad, por aquello de “todos juntos pero no reburuja’os”, como se dice; es unidos, todos juntos en el propósito y la acción, en pos de alcanzar el Poder.
Y si Miguel Vargas, junto con sus acólitos, auspician el fracaso ahora, él no tendrá éxito en su deseo de ser Presidente de la República en el 2016, pues recibirá el mismo trato, ya que en el 2016 a Leonel Fernández se le dirá Presidente y Miguel Vargas no será ni “Brahma”.
Porque su maldad –tal como se comporta- se la cobrarán las bases perredeístas cuando él aspire.  
Así que la dirigencia y militancia del PRD están obligados a ungir a Hipólito como ¡El candidato que p’al Palacio va! por elección popular...

http://hipicosas.blogspot.com/

 

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