Judicial: Autor del Blogger/Tomás E. Montás
Más allá de lo evidente
O lo hacen bien, O están para hacerlo mal
(Este es un artículo escrito por el veterano periodista Luis Pérez Casanova, de la redacción del periódico El Nacional (l.casanova@elnacional.com.do) y por considerarlo de interés se inserta en este Blogger, a propósito de los recelos deespertados por la integración de las llamadas Altas Cortes que se han considerado un bunker para resguardar a los peledeistas de culpas que puedar atribuirles o el blindaje del presidente Leonel Fernnández para que no lo embarren con vistas a sus evidenciadas aspiraciones para el año 2016, cuando podría presentarse nuevamente como candidato a la primera magistratura del Estado).
Nadie en su sano juicio podía esperar que las cortes superiores iban a ser conformadas por personas totalmente desvinculadas del quehacer político. Pero en la composición quedó evidenciado que al Consejo Nacional de la Magistratura se le fue el cuerpo entero con elecciones que responden única y exclusivamente a intereses tan partidarios como personales.
Qué otra cosa, como no sea su voto disidente en el caso de la Sun Land, explica que Julio Aníbal Suárez, Eglis Esmurdoc y Ana Rosa Bergés fueran cancelados como jueces de la Suprema Corte de Justicia. La pensión de lujo y los beneficios con que han sido compensados son un privilegio irritante, que no se deben aceptar.
Pero quizás el caso que más llama la atención es la designación de Mariano Germán como presidente de ese tribunal.
No se puede pasar por alto que además de hermano de una ministra y de otro funcionario del Gobierno, y cuñado de un senador, hace un tiempo había objetado al saliente vicepresidente del tribunal, Rafael Luciano Pichardo, por su supuesta condición de perredeísta.
Podrá ser un jurista muy competente, aunque no tenga mucho que exhibir, y un hombre muy serio, pero sus vínculos políticos y familiares no garantizan la confianza que demanda una justicia independiente. Amén de que fueron determinantes, sin autocensura de su parte, para ocupar el cargo. Con todo y que hasta cierto punto puede hablarse de representantes de la oposición, la conformación de las cortes superiores retrata un evidente traje a la medida de intereses políticos.
Aunque el presidente Leonel Fernández calificó el proceso como un ejemplo de transparencia, que a su juicio puede servir de modelo mundial, es posible que el sistema judicial haya perdido más que lo que pueda ganar con la integración de los tribunales.
Y no sólo por experiencia, sino por la falta de independencia a que atan los compromisos políticos.
